=ᐈ Como calcular el Activo Corriente

Toda empresa que se encuentra constituida legalmente debe presentar sus informes financieros a un periodo determinado, donde uno de sus componentes es el balance general y dentro del mismo se almacenan las cuentas que representan a los bienes, derechos e inversiones disponibles de la empresa (Activo Corriente y Activo no Corriente). Tomando en cuenta esta analogía, en este artículo analizaremos un poco sobre el cálculo que se hace para el sector del activo corriente.

¿Qué es el activo corriente?

El activo corriente o activo circulante es el conjunto de bienes, derechos e inversiones que tiene la empresa para uso y disposición a corto plazo, es decir, son elementos que tienen una mayor facilidad de liquidez o de convertirse en dinero. Se caracterizan por ser activos que se mueven o utilizan constantemente en las operaciones que maneja el negocio.

Por lo general, un activo corriente no debe tener una vida útil mayor a un año, sino sería considerado como un activo no corriente. El consumo de los activos corrientes debe ser de uso inmediato o a corto plazo como indica su definición.

¿Cómo calcular el activo corriente?

Para calcular el activo corriente se debe tomar en cuenta el disponible y todas las partidas que se puedan realizar dentro de las actividades de un ente económico, como por ejemplo, vender o consumir por un periodo no más de un año.

Otro factor importante para calcular un activo corriente, es identificar entre todos los activos de la empresa su orden o naturaleza de liquides que lo compone, es decir, clasificar las cuentas de activo que se puedan recuperar mucho más rápido y a un periodo no mayor a los doce meses. Entonces, si se tiene todo el grupo de cuentas de un activo en contabilidad, se debe excluir las cuentas del activo no circulante y solamente registrar que cuentas integran el activo circulante o corriente. De tal manera que el total del activo quede con la siguiente ecuación:

TOTAL ACTIVO = ACTIVO CORRIENTE + ACTIVO NO CORRIENTE

Según lo mencionado, ahora queda un poco más claro hacia donde se tiene que ir para poder calcular el activo corriente de una empresa:

ACTIVO CORRIENTE = ACTIVO NO CORRIENTE – TOTAL ACTIVO

Supongamos que en una empresa no se conoce el valor del activo corriente, pero se tiene el valor del activo no corriente de $ 20.000 y se conoce el total del activo por $ 35.000. Entonces, el activo corriente seria:

 ACTIVO CORRIENTE = 20.000 – 35.000 =15.000.-

Un ejemplo de esta naturaleza es muy poco probable que se lo realice en la vida real, ya que los contadores profesionales están preparados y especializados en poder clasificar cada una de las cuentas que compone un activo. Tomando una lista de todas las cuentas que son parte del activo corriente, la suma total haría el resultado que se busca.

Para encontrar el monto de un activo corriente es seguir atentamente el concepto como tal, y las cuentas que integran en cada uno de los componentes. A continuación citaremos las partidas que conforman en un activo corriente y que cuentas son las que se registran en ellas:

  • Activo Disponible
    • Caja y Banco
    • Caja Chica
    • Inversiones a corto plazo
  • Activo Exigible
    • Cuentas y Documentos por cobrar
    • Documentos y efectos en cobranza
  • Activo Realizable
    • Inventario de mercaderías
  • Activo Diferido
    • Pagos anticipados o pagados por adelantado

Todo el conjunto de cuentas que se tiene en un activo corriente deben ser consideradas según su compostura o naturaleza que se maneja, de esa manera se logra tener una mejor estructura de cuentas y ubicación razonable para el análisis y la toma de decisión.

En conclusión, los activos corrientes son activos que se miden por el menor tiempo de liquidez y se convierten rápidamente en dinero. La suma de todos aquellos hace referencia al activo corriente o circulante.

Como recomendación de un buen contador público, se debe tener en cuenta que el importe que se saca del activo corriente debe ser mayor que el pasivo u obligaciones que tiene la empresa, ya que de esa forma la entidad se encuentra preparada para cubrir sus deudas. En otras palabras, el activo corriente refleja la capacidad de poder generar recursos económicos a corto plazo.

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