Clasificación de las Cuentas Activo, Pasivo y Patrimonio

La salud financiera de un ente económico depende de 3 elementos fundamentales que integra la contabilidad, por supuesto que estamos hablando del Activo, Pasivo y Patrimonio.

Estos 3 grupos de la contabilidad son el pilar fundamental para conseguir un informe financiero que indique la situación económica actual en la que vive el negocio o la empresa. El hecho de conocer como están conformados cada uno de estos rubros contables, permite desarrollar un adecuado informe.

A continuación veremos cómo es la clasificación que se integra dentro de cada uno de estos elementos de la contabilidad.

Clasificación de las Cuentas Activo, Pasivo y Patrimonio

La clasificación que se tiene en el activo, pasivo y patrimonio es operado según la naturaleza que enfoca la cuenta contable, en otras palabras, de acuerdo a su comportamiento que refleja o afecta a las finanzas.

Las cuentas del activo se clasifican en:

Activos a corto plazo

Son los activos (bienes, derechos e inversiones) que la empresa tiene y maneja en sus operaciones de forma reiterativa, cuya esperanza de estos activos es conseguir un beneficio económico antes de los doce meses o durante la gestión.

Las cuentas del activo a corto plazo también se las denomina cuentas corrientes o circulantes ya que se caracterizan por tener un vita útil más corta y tienden a ser renovadas en cualquier momento. Su actuación en la contabilidad es de movimiento constante.

Entre estas cuentas de activos corrientes encontramos:

  • El dinero en efectivo (Caja).
  • Las deudas por cobrar antes de un año.
  • Las inversiones con retorno económico rápido.
  • Los inventarios de mercaderías.
  • Pagos adelantados por un bien o servicio.

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Activos a largo plazo

Son los activos (bienes, derechos e inversiones) que la empresa posee y no espera tener un beneficio económico en un tiempo cercano, sino que son más duraderos y su liquidez puede ser dada después de un año.

Las cuentas de activo a largo plazo también se las denomina no corrientes o no circulantes, debido a que su comportamiento no demuestra mayor movimiento dentro de la contabilidad. Algunas cuentas son consideradas fijas o inmovilizadas ya que su destino es ser usadas dentro de ciertas funciones que favorecen al desarrollo de la empresa.

Entre las cuentas principales del activo no corriente o a largo plazo, encontramos:

  • Terrenos y edificios de propiedad de la empresa.
  • Maquinarias y equipos de trabajo.
  • Mobiliarios y enseres.
  • Equipos de computación.
  • Motorizados o vehículos.
  • Bienes inmateriales como software, licencias, derechos de uso etc.

Además, se consideran parte de estos activos a largo plazo aquellas deudas por cobrar que tienen un intervalo de cobro mayor a un año y aquellas inversiones que están puestas dentro de otras entidades con el fin de esperar una utilidad en la siguiente gestión.

Más información: CONCEPTO DE ACTIVO NO CORRIENTE

Las cuentas de pasivo se clasifican en:

Pasivos a corto plazo

Son aquellas cuentas que la empresa adquiere por compromisos de pago con una tercera persona o entidad. Se consideran cuentas de endeudamiento u obligaciones ya que son de responsabilidad que reflejan una disminución en los recursos económicos.

Las cuentas de pasivo a corto plazo son conocidas también dentro de la contabilidad como las cuentas pasivas corrientes, circulantes o exigibles, debido a que su pago es en un tiempo cercano y por lo general son los más recurrentes a los que se enfrenta la empresa.

Entre algunas cuentas del pasivo corriente, tenemos:

  • Sueldos y salarios por pagar
  • Pago a proveedores
  • Deudas con acreedores
  • Alquileres por pagar
  • Impuestos a pagar

Además, dentro de este sector del pasivo es probable tener cobros adelantados que la empresa recibe por un servicio o producto que entrega. Es una cuenta momentánea que se considerara como una obligación a pagar, solo hasta cubrir esa necesidad.

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Cuentas de pasivo a largo plazo

Son las deudas y las obligaciones que tienen mayor tiempo de espera para poder ser cancelados. La empresa adquiere estos compromisos de pago con una oportunidad menos exigible en su pago ya que su tiempo de vencimiento está superando a un ciclo anual.

Se denominan a las cuentas de pasivo a largo plazo como las cuentas no corrientes o no circulantes, debido a su menor grado de exigibilidad en su pago, sin embargo, son endeudamientos que en algún momento llegaran y la empresa debe estar preparada con los suficientes recursos económicos para poder cubrirlas.

Entre estas cuentas de pasivo a largo plazo, encontramos:

  • Préstamos bancarios.
  • Hipotecas por pagar.
  • Dividendos por pagar.
  • Primas por pagar.
  • Bonos por pagar.

Más información: EJEMPLO DE CUENTAS PASIVAS

Las cuentas de patrimonio se clasifican en:

Aportes de los socios

Llegan a ser los importes en dinero y los bienes que los socios que son parte de la organización empresarial ponen como forma de inversión dentro del capital.

Puede ser un aporte en efectivo o también en bienes materiales e inmateriales que sirven para un funcionamiento específico dentro la entidad. La cuenta que acumula este valor que aportan los socios va dentro de la cuenta Capital o Capital Social.

Fondos propios

Son los recursos que la propia empresa puede conseguir con su desempeño laboral, es decir, por el desarrollo de sus actividades.

Ese valor que consigue la empresa también lo integra dentro de la cuenta Capital o Capital Social, así también, encontramos:

  • Ajustes de capital
  • Reservas patrimoniales
  • Resultados acumulados
  • Resultados del ejercicio

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